viernes, 12 de marzo de 2010

Miedos

Cuando era pequeña me agarraba fuerte con mis manitas al traje, porque me daba miedo caerme al caminar, además lloraba al escuchar voladores, y no me pusieras una sopladera cerca porque salía corriendo (agarrada al traje) con tal de que no me estallara cerca. Cuando empecé a quedarme sola en mi casa tardé mucho en poner música y disfrutar de mi soledad, sin estar atenta a cualquier ruido que pudiera indicar algún peligro, real o imaginario. En la calle muchas veces veía personas con intenciones malvadas en cualquier esquina, lo que incitaba a hacer mi trayecto casi casi corriendo. En fin, podría relatar un sin fín de situaciones a lo largo de mi vida que han sido propiciadas por un miedo sin fundamento y muchas veces sobre irrealidades absurdas o realidades imposibles... Todo ello, por qué no, digno de ser estudiado por un psicoanalista.

Supongo que todas estas situaciones que han estado presentes de manera más o menos constante en mi vida han supesto limitaciones y sufrimientos en muchos momentos ,pero por otra parte no considero que haya dejado de lado aquello que he querido vivir o hacer. Así, nunca dejé de ir a un campamento aunque supiera que existía la posibilidad de encontrarme sola haciendo pis detrás de un arbol a las tres de la mañana (vale... quien dice detrás de un árbol dice a diez centímetros del dobletecho... ¡pero tengo constancia de no ser la única!). O tampoco he dejado de salir sola de mi isla a descubrir "nuevos mundos" aun sabiendo que en bastantes ocasiones tocaría en la puerta algún que otro miedillo.

Tengo que aclarar que estos miedos son en su mayoría miedos que no encuentran una explicación objetiva, no son racionales y no se basan en ningún hecho "científico". Son miedos irracionales y que vienen así, de repente. Aunque como ya nos conocemos bien mis miedos y yo, puedo adivinar casi siempre, cuales son las situaciones en que les dará por hacer una visita.


Poco a poco los miedos se van superando (ya no camino agarrada a mi misma y si no me gustan los voladores son por otros motivos más fundamentados que por el ruido que hacen). Cuando alguno de esos miedos que venía a volverme loca es fulminado, pisado y echado a un lado, el sentimiento de superación personal es inmenso y te da un par de palmaditas en la espalda y te hace un poquito más grande. Asi que... mira, ¡al final los miedos sirven para algo!

En estos meses las circustancias me han dado la oportunidad de superar muchos de algunos de esos miedos y han permitido que siga conociendo mis posibilidades y mi capacidad de superación y además me han dejado disfrutar de momentos únicos como ir en bicicleta en medio del inmenso bosque inglés con la luna llena y el faro de la bici como únicas luces.


martes, 2 de marzo de 2010

Capítulo Segundo: El placer de las yemas prohibidas

La niña a la que cuido tiene tres años y unos padres maravillosos que se encargan de que todo lo que rodea a su hija sea perfecto. Entre otras, una de esas perfecciones es la alimentación diaria, de la cual me encargo yo en parte. En cada una de sus comidas podemos encontrar la cantidad adecuada para su peso y edad de cereales y sus derivados, verduras, frutas y hortalizas, carnes, pescados, legumbres y huevos, y lacteos. Es decir, puedo afirmar que la niña está completa y perfectamente proteinada, vitaminada e hidratada carbónicamente... ;)

Para facilitarme la labor de alimentar a su pequeño retoño, el padre me hizo una pequeña tabla con las comidas que le podía preparar cada día. Lunes: brócoli, carrot, rice and lamb (así de simple, cada cosa en su compartimento del plato especial de plástico que utiliza la niña). Miércoles: green beens, cucumber, potatos and two egg white (no yolk)... Supongo que algunos ya se pueden imaginar el resto de la historia... Para los que no, continuo.

Egg yolk es la yema del huevo y egg white, la clara. A la niña no le gusta el yolk, así que sólo se come la clara, concretamente dos claras de huevo, dos veces por semana, es decir le cocino cuatro huevos a la semana. Cuando me enteré de esto enseguida recordé que una de las dos partes del huevo es tremendamente colesterólica, y aunque me suponía que si el padre había decidido darle a su hija 4 claras a la semana, sería porque el colesterol vendría en la yema. Decidí salir de la duda preguntando al sabio Google, que en apenas unos segundos confirmó mis sospechas. Algunos sentimientos encontrados se apoderaron entonces de mi hemisferio sibarita del cerebro. Si yo debía darle a la niña 4 claras semanales, significaba que por natura, cuatro pequeñas jugosas bolitas amarillas quedarían desamparadas si alguien no decidía hacer uso de ellas. Yo era realmente la única persona que podría salvar a esas yemas de un fín catastrófico en la basura, pero por otro lado era conciente de que quizá no fuera del todo adecuado para mi salud y mis niveles de colesterol dar rienda suelta a tan primario deseo.

Después de cuatro semanas en la casa, quizá vaya siendo hora de hacerme un nuevo análisis de sangre, porque por supuesto, y como podrán imaginar, no he podido resistirme al placer de meterme esas pequeñas maravillosas bolitas en mi boca cada vez que toca hervirle un huevo a la niña. Con los días he aprendido a no dejarlo ocho minutos,sino apenas seis, para que la bolita no quede del todo sancochada, y poder sentir como rompe y se extiende el líquido por todos los rincones de la boca... es algo que no se puede explicar con palabras, por ello no me queda más que invitarles a que prueben ustedes también a vivir el placer de las yemas prohibidas... :D

sábado, 27 de febrero de 2010

Capítulo Primero: No te rindas

Como ya dije, aquí no solo iré dejando mis propios pensamientos, sino también aquellas cosas que llegan de afuera pero que influyen en el curso de los acontecimientos.

Me encontraba en mi "hostal-hogar" de Picadilly el primer domingo después de la huída, con la incertidumbre de mi destino totalmente apoderada de mi persona, con un trozo de "pascualina" uruguaya en la mochila para calentar en el microondas del hostal si las tripas se acordaban de resollar, y con mi mini hp como ventana al mundo, a las personas y a las oportunidades. Entonces apareció en el correo-e un nuevo mensaje titulado "Caballos". En cualquier otra ocasión sin duda lo hubiera borrado directamente, pero en este caso lo abrí ,porque siendo mi madre la remitente, incluso una presentación power point de caballos tendría algo que decir. Las imagenes eran de lo más vulgares, y pasaron a último plano desde el momento en que empecé a leer el poema que había escrito. En ese momento la lagrimilla que todo el día había estado ahi salió con un montones de ellas más, pero fue lo mejor que podía haber leído. He vuelto a leer el poema muchas veces desde entonces (ya sin caballos), y quiero publicarlo porque realmente ha sido determinante en esta aventura. Después de unas cuantas horas me comí la pascualina a la salud de su autor...

No te rindas

No te rindas, aún estás a tiempo
De alcanzar y comenzar de nuevo,
Aceptar tus sombras,
Enterrar tus miedos,
Liberar el lastre,
Retomar el vuelo.
No te rindas que la vida es eso,
Continuar el viaje,
Perseguir tus sueños,
Destrabar el tiempo,
Correr los escombros,
Y destapar el cielo.
No te rindas, por favor no cedas,
Aunque el frio queme,
aunque el miedo muerda,
aunque el sol se esconda,
Y se calle el viento,
Aún hay fuego en tu alma,
Aún hay vida en tus sueños.
Porque la vida es tuya y tuyo también el deseo,
Porque lo has querido y porque te quiero,
Porque existe el vino y el amor, es cierto.
Porque no hay heridas que no cure el tiempo.
Abrir las puertas,
Quitar los cerrojos,
Abandonar las murallas que te protegieron,
Vivir la vida y aceptar el reto,
Recuperar la risa,
Ensayar un canto,
Bajar la guardia y extender las manos,
Desplegar las alas
E intentar de nuevo,
Celebrar la vida y retomar los cielos.
No te rindas, por favor no cedas,
Aunque el frio queme,
Aunque el miedo muerda,
Aunque el sol se ponga y se calle el viento,
Aún hay fuego en tu alma,
Aún hay vida en tus sueños,
Porque cada día es un comienzo nuevo,
Porque esta es la hora y el mejor momento.
Porque no estás solo, porque yo te quiero.

Mario Benedetti


Introducción

Antes de empezar esta aventurilla por tierras inglesas tocaron las pertinentes despedidas, entre ellas una última noche en el Bote con el nuevo Trivial de Reyes y unos cuantos buenos amigos. Poco antes de irme uno de ellos me dijo... Helena, ¡te tienes que hacer un blog para mantenernos informados de todos tus momentos, experiencias, aventuras y desventuras! Pues sí, pensé, ¡una gran idea! Ya me lo repite mi tía cada vez que voy a un lugar nuevo y nunca termino de arrancar... ¡pero esta vez no falla! Desde que llegue me lo hago...

Ya llegué, hace casi dos meses, y cada día me acuerdo yo del Blog que no me hago, y no por falta de aventuras, ni por falta de tiempo, pero... yo que sé, un blog es como una responsabilidad, es un tamagochi que tienes que dar de comer y llevarlo a cagar cada dos horas... (Primera duda: ¿se puede poner "cagar" en un blog? poder se puede, claro, ¡con la de cosas horrorosas que nos encontramos a diario en la red! pero ¿se puede en Mi blog? ¿puedo poner cagar y luego hacer una disertación acerca del actual sistema educativo español?) Bueno, supongo que ese peso virtual que conlleva la creación del blog unido a muchas otras dudas que me planteo similares a la anterior, han sido los que han hecho que hasta ahora no me hubiera decidido a hacerlo. Sin embargo, creo que ha sido el hecho de que en apenas una semana mi padre y mis dos hermanos se hayan hecho cada uno sus respectivos "blogses", el que ha determinado mi definitiva puesta en escena.

Las ideas son muchas, el tiempo es de bosque a mi alrededor en varios kilómetros a la redonda... asi que intentaré dejar aquí parte de todo lo que estoy viviendo, pensando y sintiendo, incluyendo aquellas cosas que sin ser propias aportan un sentido al curso de las cosas.

Espero que lo disfruten, que esto sea una herramienta más para sentirnos cerquita a pesar de los millones de centímetros que nos unen, y que no duden en aportar todo aquello que deseen para hacerlo más divertido, emocionante y enriquecedor.

Lots of English kisses ;)